Título original: Holy Motors. Director: Leos Carax (2012). Nacionalidad: Francia, Alemania.
Producción: Les Films de Losange, CNC, Pierre Grise Productions. Guion: Leos Carax. Fotografía: Yves Cape y Caroline Champetier. Diseño de producción: Florian Sanson. Montaje: Nelly Quettier.
Actores: Denis Lavant (Sr. Oscar / el banquero / la mendiga / Sr. Merde / el acordeonista / el especialista en motion capture / la víctima / el moribundo / el hombre de la casa), Édith Scob (Céline), Eva Mendes (Kay M.), Kylie Minogue (Eva / Jean), Élise Lhomeau (Léa / Élise), Jeanne Disson (Angèle), Michel Piccoli
Duración: 115 minutos Versíón original con subtítulos en español
Premio a la mejor película en el festival de Sitges 2012; Méliès d’argent al mejor fi lm europeo 2012; mejor actor en el ranking de los críticos de Los Ángeles
El señor Oscar es una persona que viaja de vida en vida: pasa de ser un gran ejecutivo a un asesino, después un mendigo, una criatura monstruosa, un padre de familia… El señor Oscar parece interpretar varios papeles, sumergiéndose completamente en cada uno de ellos.Vive solo, únicamente acompañado por Céline, una señora mayor y rubia que conduce la limusina que le lleva a París y sus alrededores, viviendo una identidad diferente en cada ocasión.
Los amigos de emociones fuertes, de experiencias novedosas, los buscadores de experimentos que rompan la monotonía del cine comercial, quienes deseen un estímulo que inquiete algo la normalidad de sus vidas, aquí tienen la ocasión que estaban buscando. Por supuesto, quienes creen que el cine es amabilidad, sonrisas, buenas maneras y un ambiente plácido y complaciente, que se preparen a sentir el sobresalto de una de las películas más sorprendentes y rompedoras vistas en Europa durante los últimos meses. Claro que no todos piensan lo mismo; por ejemplo, Carlos Boyero, encantado siempre de conocerse a sí mismo y llevar la contraria a sus colegas. Pueden hacerse una idea de a dónde vamos hoy leyendo este breve resumen de opiniones críticas: “Excitante, opaca, desgarradora y completamente chalada (…) una obra cinematográfica deliciosamente absurda que evalúa la vida, la muerte y todo lo que hay entre ambas, reflejado en un espejo deformante” (Meghan Lehmann: The Hollywood Reporter). “Es extraña y maravillosa, rica y rara… totalmente demencial” (Peter Bradshaw: The Guardian). “Una sucesión de tonterías sin gracia, los caprichos vacuamente surrealistas de un niño consentido e irritante” (Carlos Boyero: El País). “Críptico, violento, genial, torpe, enfermizo, cutre y febril. Todo cabe en una película en la que hasta los coches hablan” (Luis Martínez: Diario El Mundo). “Una lección de cine libre y salvaje (…) La belleza recorre toda la película, a pesar de que el culto al feísmo y a lo bizarro parezca colonizarla.” (Sergi Sánchez: La Razón). “Un salto sobre la barrera de la normalidad, y una obra extraña, inescrutable, demente, hipnótica, a ratos muy idiota y casi siempre bellísima.” (Nando Salvá: El Periódico). “Una de las más bellas películas sobre cine y el arte de la narración como necesidad para contarnos a nosotros mismos y a los demás.” (Daniel De Partearroyo: Cinemanía). “Película inagotable y mutante, capaz de trascender su aparente pesimismo en el fértil renacimiento de un cineasta inspirador, es un espectáculo ideal para sobreexcitar todas las zonas erógenas del espectador” (Jordi Costa: El País). “Sorprendente, incomparable, inconmensurable (…) una obra sin embargo no apta para todos los paladares. (…) ¿Les apetece una experiencia sensorial de alta graduación?” (Jordi Batlle Caminal: La Vanguardia) . Pues ya lo ven: opiniones para todos los gustos pero la mayoría destaca la originalidad, el riesgo, la experimentación que se ofrece en estas imágenes insólitas. A por ella.