Llega esta semana al Cineclub Chaplin una película de nacionalidad lituana, aunque en la producción intervienen también España y Suecia, pero desde luego no abundan entre nosotros obras que tengan un origen como el que firma la directora Marija Kavtaradze (Vilna, 1991), que con este título, Slow, hace su debut en las tareas realizadoras y con un respetable éxito, porque tras la proyección en el festival de Sundance, fue muy bien recibida, como luego ha sucedido en otras comparecencias. Se trata de una propuesta muy novedosa, porque estamos acostumbrados a ver películas en las que se ofrecen relaciones amorosas con el conveniente acompañamiento sexual, más o menos explícito a gusto del director, pero en este caso la historia bascula en un sentido contrario: los protagonistas, Dovydas y Elena, se sienten atraídos y parecen dispuestos a iniciar una relación, propósito que se complica cuando el hombre se declara asexual, es decir, no siente ni tiene interés alguno por ese tipo de intimidades por lo que su relación deberá mantenerse en el plano de lo puramente romántico. Sin duda, un planteamiento muy interesante, que se mantendrá vigente hasta la solución final. Slow (traducción literal: lento, lentamente; también se interpreta como más vale la calidad que la cantidad), tiene una duración de 104 minutos y se proyectará este miércoles, 15 de mayo, en versión original subtitulada, en sesiones a las 17, 19,30 y 22 horas en la Sala Cinco de Multicines Odeón Cuenca.