Here, un hombre bueno, es una película que en buena medida rompe los esquemas ya habituales en el cine moderno, marcados de manera generalizada por el estrépito, la acción, los efectos especiales y el lenguaje zafio que ha venido a sustituir a los antiguos maravillosos diálogos que escribían los buenos guionistas. La película que esta semana llega al Cineclub Chaplin puede parecer propia de otra época, pero en realidad corresponde a ésta, porque de aquí y de ahora son los personajes, seres humanos, que dan forma a un relato que puede llegar a ser minimalista, porque está formado por escenas amables, sensibles, con una envoltura conmovedora acerca de la inocencia que denotan los personajes protagonistas, un trabajador rumano que está a punto de regresar a su país y una joven china a la que conoce casualmente. El director, Bas Devos (Zoerset, Bélgica, 1983) ha encontrado el tono adecuado para trasladar a la pantalla la historia de un encuentro inesperado, que lo cambia todo, por una de esas casualidades que ofrece la vida, de manera que los dos seres humanos protagonistas verán cómo, a partir de cierto momento, todo cambia para ellos. Here, un hombre bueno, tiene una duración de 84 minutos y podrá verse en sesiones, a las 17, 19,30 y 22 horas, este miércoles, 29 de enero, en la Sala 5 de Multicines Cuenca.