Fuegos artificiales es el título que el Cineclub Chaplin presenta esta semana en la que es su sesión número 1798. Se trata de una producción italiana, dirigida por Beppe Fiorello y ambientada en la isla de Sicilia, en un momento histórico situado en las vísperas de la modernidad, año 1982, cuando en el país todo el mundo sueña con ganar el campeonato mundial de fútbol y sin que todavía hayan podido arraigar costumbres y formas de vida que esos momentos todavía eran situaciones de alto riesgo y más en ambiente sociales cerrados, muy apegados al conservadurismo, como sucedía en la hermosa isla siciliana. Por eso, dos jóvenes que se encuentran en la transición de la adolescencia a la madurez, van a encontrar serios problemas para poder llevar adelante su relación amorosa, surgida desde la amistad, pero que va a encontrar la incomprensión de sus respectivas familias. La historia fílmica está basada en hechos reales que concluyeron de manera trágica, un final que el director ha querido ahorrar a los espectadores prefiriendo optar por un desenlace abierto, que admite todas las hipótesis, pero sin duda lo que a Fiorello ha interesado más es el propio núcleo de la película, esto es, la historia amorosa de los dos muchachos, dejando fuera del relato el triste final. Fuegos artificiales tiene una duración de 134 minutos. Será proyectada este miércoles, 12 de noviembre, en sesiones a las 17, 19,30 y 22 horas, en la Sala 5 de Multicines Cuenca.