La Segunda Guerra Mundial viene ofreciendo al cine un material inagotable, a través de múltiples variantes. Una de ellas, no demasiado explotada todavía, se refiere a la descomposición del régimen nazi alemán en los momentos finales del conflicto y, en ese ámbito, ciertamente amplio, se inscribe la problemática de un ejército que había paseado por Europa como fácil conquistador y ahora se enfrenta con la perspectiva de la derrota, lo que traerá consigo, de manera inevitable, su desmembración como tal grupo organizado sustituido por miles de hombres sin horizonte ni futuro, lo que obliga a cada cual a buscar una salida como pueda. En esa situación se encuentra el protagonista de El capitán, una película dirigida por Robert Schwenke, estructurada en torno a un simple soldado que, en aquellos momentos de desesperación, usurpa la personalidad de un oficial con cuyo uniforme intenta escapar de su bando, en busca de una salida en el de los vencedores. Va a ser una deserción en toda regla, una huida hacia delante, luchando con situaciones cada vez más complicadas, incluso terrible, cuando la desesperación se impone a cualquier otro concepto, como la amistad, el compañerismo o la decencia. El capitán tiene una duración de 118 minutos y se proyectará este miércoles, día 27 de febrero, en versión original subtitulada en español, a las 17, 19,30 y 22 horas en la Sala Cinco de Multicines Odeón Cuenca.