Generalmente, las películas futuristas entran también en el territorio de la ciencia-ficción, en cuanto que ofrecen la visión de un mundo totalmente diferente al nuestro, en el que las naves espaciales caminan alegremente por el espacio dando ocupación a seres de fisonomía extraordinaria y momentos de emociones angustiosas. Langosta habla de un mundo futuro, pero aquí mismo, sin necesidad de recurrir a naves espaciales ni a personajes estrambóticos. Lo que cambia, en la visión del director griego Yorgos Lanthimos es la estructura social, los comportamientos personales, las actitudes políticas. En ese horizonte imaginado es condición inexcusable que todos los seres humanos vivan en pareja, de manera que quienes no la encuentran, o no la quieren, se ven obligados a hacerlo, mediante un plazo perentorio de 45 días durante el que son encerrados en un hotel para fomentar las relaciones necesarias que deben concluir en el emparejamiento forzoso; quienes fracasen en el intento serán transformados en un animal previamente elegido por ellos mismos. La langosta del título es, precisamente, lo que quiere ser el protagonista de la película si no consigue encontrar nueva pareja tras su separación anterior. Interpretada por Colin Farrell, Rachel Weisz y Léa Seydoux, Langosta es la película número 1525 del Cine Club Chaplin y podrá verse este miércoles, 25 de mayo, en versión original subtitulada, en Multicines Odeón en sesiones a las 17, 19,30 y 22 horas.